Una efectiva coordinación entre la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Brianco) Antofagasta de la PDI y Gendarmería de Chile permitió desarticular un intento de ingreso de drogas al Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de la capital regional. El procedimiento se originó gracias a la vigilancia de Gendarmería, que mediante el sistema de circuito cerrado de televisión (CCTV), detectó la sospechosa entrega de un paquete de parte de una visitante a un interno. Tras la revisión física del objeto, se confirmó la presencia de sustancias ilícitas: 5,02 gramos de ketamina y 78,63 gramos de cannabis, distribuidas en bolsas. De inmediato, se activó el protocolo de colaboración con la Brianco PDI, cuyos detectives se trasladaron al lugar para establecer la flagrancia del delito. La mujer fue detenida por microtráfico de drogas y puesta a disposición del Ministerio Público. Tras la audiencia de control de detención, el tribunal decretó la prisión preventiva de la imputada por considerarse un peligro para la seguridad de la sociedad, fijándose un plazo de 100 días para la investigación. Las sustancias incautadas fueron remitidas al Servicio de Salud de Antofagasta. Finalmente, este operativo subraya el trabajo conjunto entre ambas instituciones, fundamental para fortalecer la seguridad y evitar el ingreso de elementos prohibidos al interior de los recintos penitenciarios.
En los próximos días serán habilitados dos módulos de Máxima Seguridad en el Complejo Penitenciario de Antofagasta, con capacidad para 100 internos considerados de alto compromiso delictual. Cada uno permanecerá en celdas individuales y bajo un estricto régimen, similar al aplicado desde hace un año en el Recinto Especial Penitenciario de Alta Seguridad (REPAS) en Santiago. Con esta medida, Antofagasta se convertirá en la segunda región del país en contar con un sistema diseñado bajo estándares de máxima seguridad, orientado a la custodia de líderes y miembros de bandas de crimen organizado. Los internos deberán usar uniforme institucional y tendrán un régimen de visitas restringido mediante locutorio, sin contacto físico. El anuncio fue realizado por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Jaime Gajardo Falcón, junto al director nacional de Gendarmería, Rubén Pérez Riquelme, tras inspeccionar el avance de las obras. El poblamiento de los módulos será gradual. El ministro Gajardo enfatizó que el objetivo es impedir que, como ha ocurrido en otros países de la región, las bandas criminales se fortalezcan desde el interior de las cárceles. “Una vez que los líderes estén en prisión, debemos separarlos, cortar su contacto con el exterior y evitar que sigan operando”, señaló. Por su parte, Rubén Pérez explicó que se aplicará un régimen de control riguroso, con protocolos estratégicos que no pueden detallarse públicamente, pero que consideran un modelo replicable en otras regiones. El sistema incluye celdas monitoreadas 24 horas con circuito cerrado de televisión, control de encomiendas, calendarización de lavandería institucional, limitación de salidas a patio y atención psicosocial y de salud periódica. Durante la visita, participaron también la seremi de Justicia de Antofagasta, Trissy Figueroa, y el director regional de Gendarmería, coronel Rodrigo Salinas Robles, quienes destacaron que la iniciativa forma parte del esfuerzo nacional por reforzar la seguridad pública y contener la influencia del crimen organizado desde los recintos penitenciarios.
En un esfuerzo por combatir el crimen organizado al interior de los recintos penitenciarios, Gendarmería de Chile, en el marco del Plan Nacional contra el Crimen Organizado, realizó un masivo operativo de allanamiento en ocho cárceles del norte del país. La acción, que contó con la presencia del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Jaime Gajardo Falcón, y otras autoridades regionales y de la institución, se centró en los complejos penitenciarios de Arica, Alto Hospicio y Antofagasta, además de otros centros de detención en Iquique, Calama, Tocopilla y Taltal. El operativo, que movilizó a más de 800 funcionarios, permitió registrar a 6.932 personas privadas de libertad y decomisar 38 teléfonos celulares, 44 litros de licor artesanal, 952 kilogramos de sustancias ilícitas y 209 armas blancas. Según el ministro Gajardo, este tipo de procedimientos, que se implementan desde 2022, se están perfeccionando con allanamientos más exhaustivos y focalizados por zonas. Además de los resultados del operativo, las autoridades presentaron un vehículo blindado de alta seguridad destinado al traslado de reclusos de alto riesgo en las ciudades de Antofagasta e Iquique. Este tipo de automóvil, que ya opera en Valparaíso y próximamente llegará a Arica y La Serena, cuenta con tracción 4x4, blindaje táctico de 360 grados y monitoreo permanente a través de GPS, lo que garantiza la seguridad en los desplazamientos. Finalmente, en la región de Antofagasta, los allanamientos en las cinco unidades penales resultaron en la incautación de 71 armas blancas, 12 celulares y diversas sustancias ilícitas. Más de 260 funcionarios participaron en el registro de cerca de 2.000 internos, confirmando el compromiso de la institución con el fortalecimiento de la seguridad en los centros penitenciarios del país.
Quince mujeres, usuarias del Centro de Reinserción Social de Antofagasta, completaron el programaFamilia y Pareja de Gendarmería, una iniciativa diseñada para entregarles herramientas y así evitar la reincidencia delictual. Este taller se realizó por primera vez en la comuna, con el objetivo de ayudarlas a construir un camino prosocial y sostenible. El programa, que se extendió por tres meses, se centró en la problemática de la influencia familiar y de pareja en la comisión de delitos. Las participantes, que cumplen penas de Libertad Vigilada Intensiva, aprendieron a identificar y distanciarse de las personas y entornos negativos. Además, se les enseñó a apoyarse en círculos virtuosos para consolidar su proceso de reinserción. Ana, una de las beneficiarias del programa, destacó el impacto positivo del taller.Nos ayudaron mucho. Varias teníamos problemas familiares y sentimentales, y siempre nos orientaron. Nos ayudó a unirnos y aprendimos a alejarnos de lo procriminal. Varias hemos tenido cambios y ahora sabemos que cuando hay un problema, nos alejamos y ya no tenemos a los amigos que teníamos antes, comentó. Ante esto, la ceremonia de certificación contó con la presencia de la seremi de Gobierno, Paulina Larrondo, y el director regional de Gendarmería, Rodrigo Salinas Robles. Miguel Bravo, jefe del Centro de Reinserción Social, resaltó la importancia del compromiso de las usuarias.Es fundamental que cada una comprenda que el camino hacia el futuro lo construimos entre todos. Sabemos que no es simple, pero estamos seguros de que se puede lograr, afirmó. Finalmente, la alta asistencia y el compromiso de las participantes demostraron el éxito de este primer taller, que abre un camino de esperanza para la reinserción social de estas mujeres en la región.
Un importante paso en la reinserción social y el beneficio comunitario se dio en Antofagasta con la firma de un convenio entre Gendarmería de Chile y la Junta de Vecinos del Conjunto Habitacional Peñablanca. Este acuerdo permitirá implementar la pena de Prestación de Servicios en Beneficio de la Comunidad, una medida sustitutiva impuesta por los tribunales que busca que quienes han cometido delitos reparen su falta a través de trabajo en favor de la sociedad. Ante esto, el convenio habilitará 15 plazas mensuales para que personas bajo esta pena realicen diversas actividades en el sector, tales como aseo, mantenimiento de la sede vecinal y la multicancha, cuidado de áreas verdes y otros espacios comunes. Estas labores serán supervisadas por un integrante de la Junta de Vecinos, quien orientará el plan de trabajo, y a su vez, por un delegado de Gendarmería, asegurando el cumplimiento efectivo de la pena. Asimismo, Leandro Montes, presidente de la Junta de Vecinos de Peñablanca, destacó la relevancia de esta iniciativa para su comunidad.Estamos sumamente agradecidos de poder firmar este convenio junto a Gendarmería porque será una gran ayuda para nosotros, en el caso de la limpieza, la mantención de las áreas verdes. Hay que tener el ánimo de dar una segunda oportunidad a las personas, expresó Montes, subrayando la escasez de mano de obra para este tipo de tareas que a menudo enfrentan. La seremi de Justicia y DD.HH., quien participó en la firma, enfatizó la conexión entre reinserción social y seguridad.Reinserción social es seguridad, es por ello que junto a Gendarmería de Chile relevamos una nueva firma de convenio de colaboración con una junta de vecinos de Antofagasta que permite avanzar en materia de reinserción social de personas sancionadas bajo la Ley 20.603, transformándose en un aporte comunitario y un beneficio para organizaciones sin fines de lucro, afirmó, resaltando la labor de Gendarmería más allá de la custodia. Actualmente, en la región existen 45 convenios vigentes de este tipo, 24 de ellos en Antofagasta, donde 105 personas cumplen penas sustitutivas. El coronel Rodrigo Salinas, director de Gendarmería Antofagasta, explicó quecomo Gendarmería, estamos de forma permanente generando estos convenios a fin de que tengamos las plazas disponibles para el cumplimiento de las penas sustitutivas de quienes fueron sancionados por un Tribunal y es importante que la comunidad conozca que existen estas alternativas que son un aporte para el trabajo de los dirigentes y también un apoyo a la reinserción. Finalmente, el convenio tendrá una duración inicial de dos años, con posibilidad de ser renovado. La seremi de Gobierno, Paulina Larrondo, hizo un llamado a otras organizaciones sociales a sumarse a esta iniciativa, destacando que la reinserción social es un desafío conjunto entre el Estado y la comunidad, que además contribuye a mejorar los espacios públicos y la calidad de vida de los vecinos.
Una efectiva coordinación entre la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado (Brianco) Antofagasta de la PDI y Gendarmería de Chile permitió desarticular un intento de ingreso de drogas al Centro de Cumplimiento Penitenciario (CCP) de la capital regional. El procedimiento se originó gracias a la vigilancia de Gendarmería, que mediante el sistema de circuito cerrado de televisión (CCTV), detectó la sospechosa entrega de un paquete de parte de una visitante a un interno. Tras la revisión física del objeto, se confirmó la presencia de sustancias ilícitas: 5,02 gramos de ketamina y 78,63 gramos de cannabis, distribuidas en bolsas. De inmediato, se activó el protocolo de colaboración con la Brianco PDI, cuyos detectives se trasladaron al lugar para establecer la flagrancia del delito. La mujer fue detenida por microtráfico de drogas y puesta a disposición del Ministerio Público. Tras la audiencia de control de detención, el tribunal decretó la prisión preventiva de la imputada por considerarse un peligro para la seguridad de la sociedad, fijándose un plazo de 100 días para la investigación. Las sustancias incautadas fueron remitidas al Servicio de Salud de Antofagasta. Finalmente, este operativo subraya el trabajo conjunto entre ambas instituciones, fundamental para fortalecer la seguridad y evitar el ingreso de elementos prohibidos al interior de los recintos penitenciarios.
En los próximos días serán habilitados dos módulos de Máxima Seguridad en el Complejo Penitenciario de Antofagasta, con capacidad para 100 internos considerados de alto compromiso delictual. Cada uno permanecerá en celdas individuales y bajo un estricto régimen, similar al aplicado desde hace un año en el Recinto Especial Penitenciario de Alta Seguridad (REPAS) en Santiago. Con esta medida, Antofagasta se convertirá en la segunda región del país en contar con un sistema diseñado bajo estándares de máxima seguridad, orientado a la custodia de líderes y miembros de bandas de crimen organizado. Los internos deberán usar uniforme institucional y tendrán un régimen de visitas restringido mediante locutorio, sin contacto físico. El anuncio fue realizado por el ministro de Justicia y Derechos Humanos, Jaime Gajardo Falcón, junto al director nacional de Gendarmería, Rubén Pérez Riquelme, tras inspeccionar el avance de las obras. El poblamiento de los módulos será gradual. El ministro Gajardo enfatizó que el objetivo es impedir que, como ha ocurrido en otros países de la región, las bandas criminales se fortalezcan desde el interior de las cárceles. “Una vez que los líderes estén en prisión, debemos separarlos, cortar su contacto con el exterior y evitar que sigan operando”, señaló. Por su parte, Rubén Pérez explicó que se aplicará un régimen de control riguroso, con protocolos estratégicos que no pueden detallarse públicamente, pero que consideran un modelo replicable en otras regiones. El sistema incluye celdas monitoreadas 24 horas con circuito cerrado de televisión, control de encomiendas, calendarización de lavandería institucional, limitación de salidas a patio y atención psicosocial y de salud periódica. Durante la visita, participaron también la seremi de Justicia de Antofagasta, Trissy Figueroa, y el director regional de Gendarmería, coronel Rodrigo Salinas Robles, quienes destacaron que la iniciativa forma parte del esfuerzo nacional por reforzar la seguridad pública y contener la influencia del crimen organizado desde los recintos penitenciarios.
En un esfuerzo por combatir el crimen organizado al interior de los recintos penitenciarios, Gendarmería de Chile, en el marco del Plan Nacional contra el Crimen Organizado, realizó un masivo operativo de allanamiento en ocho cárceles del norte del país. La acción, que contó con la presencia del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Jaime Gajardo Falcón, y otras autoridades regionales y de la institución, se centró en los complejos penitenciarios de Arica, Alto Hospicio y Antofagasta, además de otros centros de detención en Iquique, Calama, Tocopilla y Taltal. El operativo, que movilizó a más de 800 funcionarios, permitió registrar a 6.932 personas privadas de libertad y decomisar 38 teléfonos celulares, 44 litros de licor artesanal, 952 kilogramos de sustancias ilícitas y 209 armas blancas. Según el ministro Gajardo, este tipo de procedimientos, que se implementan desde 2022, se están perfeccionando con allanamientos más exhaustivos y focalizados por zonas. Además de los resultados del operativo, las autoridades presentaron un vehículo blindado de alta seguridad destinado al traslado de reclusos de alto riesgo en las ciudades de Antofagasta e Iquique. Este tipo de automóvil, que ya opera en Valparaíso y próximamente llegará a Arica y La Serena, cuenta con tracción 4x4, blindaje táctico de 360 grados y monitoreo permanente a través de GPS, lo que garantiza la seguridad en los desplazamientos. Finalmente, en la región de Antofagasta, los allanamientos en las cinco unidades penales resultaron en la incautación de 71 armas blancas, 12 celulares y diversas sustancias ilícitas. Más de 260 funcionarios participaron en el registro de cerca de 2.000 internos, confirmando el compromiso de la institución con el fortalecimiento de la seguridad en los centros penitenciarios del país.
Quince mujeres, usuarias del Centro de Reinserción Social de Antofagasta, completaron el programaFamilia y Pareja de Gendarmería, una iniciativa diseñada para entregarles herramientas y así evitar la reincidencia delictual. Este taller se realizó por primera vez en la comuna, con el objetivo de ayudarlas a construir un camino prosocial y sostenible. El programa, que se extendió por tres meses, se centró en la problemática de la influencia familiar y de pareja en la comisión de delitos. Las participantes, que cumplen penas de Libertad Vigilada Intensiva, aprendieron a identificar y distanciarse de las personas y entornos negativos. Además, se les enseñó a apoyarse en círculos virtuosos para consolidar su proceso de reinserción. Ana, una de las beneficiarias del programa, destacó el impacto positivo del taller.Nos ayudaron mucho. Varias teníamos problemas familiares y sentimentales, y siempre nos orientaron. Nos ayudó a unirnos y aprendimos a alejarnos de lo procriminal. Varias hemos tenido cambios y ahora sabemos que cuando hay un problema, nos alejamos y ya no tenemos a los amigos que teníamos antes, comentó. Ante esto, la ceremonia de certificación contó con la presencia de la seremi de Gobierno, Paulina Larrondo, y el director regional de Gendarmería, Rodrigo Salinas Robles. Miguel Bravo, jefe del Centro de Reinserción Social, resaltó la importancia del compromiso de las usuarias.Es fundamental que cada una comprenda que el camino hacia el futuro lo construimos entre todos. Sabemos que no es simple, pero estamos seguros de que se puede lograr, afirmó. Finalmente, la alta asistencia y el compromiso de las participantes demostraron el éxito de este primer taller, que abre un camino de esperanza para la reinserción social de estas mujeres en la región.
Un importante paso en la reinserción social y el beneficio comunitario se dio en Antofagasta con la firma de un convenio entre Gendarmería de Chile y la Junta de Vecinos del Conjunto Habitacional Peñablanca. Este acuerdo permitirá implementar la pena de Prestación de Servicios en Beneficio de la Comunidad, una medida sustitutiva impuesta por los tribunales que busca que quienes han cometido delitos reparen su falta a través de trabajo en favor de la sociedad. Ante esto, el convenio habilitará 15 plazas mensuales para que personas bajo esta pena realicen diversas actividades en el sector, tales como aseo, mantenimiento de la sede vecinal y la multicancha, cuidado de áreas verdes y otros espacios comunes. Estas labores serán supervisadas por un integrante de la Junta de Vecinos, quien orientará el plan de trabajo, y a su vez, por un delegado de Gendarmería, asegurando el cumplimiento efectivo de la pena. Asimismo, Leandro Montes, presidente de la Junta de Vecinos de Peñablanca, destacó la relevancia de esta iniciativa para su comunidad.Estamos sumamente agradecidos de poder firmar este convenio junto a Gendarmería porque será una gran ayuda para nosotros, en el caso de la limpieza, la mantención de las áreas verdes. Hay que tener el ánimo de dar una segunda oportunidad a las personas, expresó Montes, subrayando la escasez de mano de obra para este tipo de tareas que a menudo enfrentan. La seremi de Justicia y DD.HH., quien participó en la firma, enfatizó la conexión entre reinserción social y seguridad.Reinserción social es seguridad, es por ello que junto a Gendarmería de Chile relevamos una nueva firma de convenio de colaboración con una junta de vecinos de Antofagasta que permite avanzar en materia de reinserción social de personas sancionadas bajo la Ley 20.603, transformándose en un aporte comunitario y un beneficio para organizaciones sin fines de lucro, afirmó, resaltando la labor de Gendarmería más allá de la custodia. Actualmente, en la región existen 45 convenios vigentes de este tipo, 24 de ellos en Antofagasta, donde 105 personas cumplen penas sustitutivas. El coronel Rodrigo Salinas, director de Gendarmería Antofagasta, explicó quecomo Gendarmería, estamos de forma permanente generando estos convenios a fin de que tengamos las plazas disponibles para el cumplimiento de las penas sustitutivas de quienes fueron sancionados por un Tribunal y es importante que la comunidad conozca que existen estas alternativas que son un aporte para el trabajo de los dirigentes y también un apoyo a la reinserción. Finalmente, el convenio tendrá una duración inicial de dos años, con posibilidad de ser renovado. La seremi de Gobierno, Paulina Larrondo, hizo un llamado a otras organizaciones sociales a sumarse a esta iniciativa, destacando que la reinserción social es un desafío conjunto entre el Estado y la comunidad, que además contribuye a mejorar los espacios públicos y la calidad de vida de los vecinos.