Las notificaciones por intentos de suicidio en la región de Antofagasta experimentaron un drástico incremento del 47% al comparar los 12 meses del año 2024 con tan solo los primeros 10 meses del 2025. El número de casos reportados creció de 351 a 515, según datos entregados por la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Salud. Ante esto, el Secretario Regional Ministerial de Salud, Alberto Godoy, detalló que la mitad de los casos notificados se concentran en un rango etario sensible: personas entre 10 y 23 años. Desglosando las cifras de enero a octubre de 2025, se registraron 49 intentos en menores de 10 a 14 años, 139 en el grupo de 15 a 19 años, y 103 en jóvenes de 20 a 24 años. Asimismo, Godoy explicó que parte de este aumento estadístico se debe a un exhaustivo trabajo de abogacía realizado por la Unidad de Epidemiología de enfermedades no transmisibles de la Seremi con diversos recintos de salud. Dado que no existe una obligación legal para que los establecimientos informen sobre los intentos de suicidio, la entidad desarrolló una intensa labor de concientización y acompañamiento para lograr un compromiso de notificación por parte de los delegados de epidemiología. Contar con datos más fidedignos y completos, que abarcan personas de 10 a 87 años, permite a la autoridad focalizar mejor las acciones preventivas. Los grupos etarios con mayor incidencia en 2025 (15-19, 20-24 y 25-29 años) coinciden con el patrón observado durante 2024. La Seremi de Salud destacó que en la gran mayoría de los casos subyace un componente de depresión, una patología cubierta por el Sistema de Garantías Explícitas en Salud (GES). Ante este escenario, la autoridad sanitaria reiteró la responsabilidad fundamental que recae en padres, familiares y amigos de generar espacios de conversación y confianza. Es necesario hacer todo lo posible por llegar al corazón de los seres queridos y lograr que nos cuenten qué les ocurre, evaluando la eventual intervención de un especialista, enfatizó Godoy. Finalmente, la Seremi recordó a la comunidad las líneas de ayuda disponibles del Ministerio de Salud: la línea *4141, activa las 24 horas del día, los 7 días de la semana, para la prevención de suicidio y atención de cuadros ansiosos o depresivos, y el call center Salud Responde (600-360-7777), con el mismo horario de servicio.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año cerca de 727 mil personas mueren por suicidio, situándolo como una de las principales causas de muerte en la juventud. En 2021 fue la tercera causa de fallecimiento en jóvenes de 15 a 29 años a nivel global y, en Chile, ocupa el segundo lugar en ese mismo rango etario. Aunque suele asociarse a países desarrollados, el 73% de los suicidios ocurren en naciones de ingresos bajos y medios. La Dra. María Fernanda Vidal, académica de la Universidad de Antofagasta y psiquiatra del Hospital Clínico Universitario, explica que “la conducta suicida es la expresión de un profundo malestar, donde la persona percibe que terminar con su vida es la única salida”. Entre los principales factores de riesgo menciona depresión, ansiedad, consumo problemático de drogas, ausencia de redes de apoyo, acoso escolar, problemas económicos o enfermedades crónicas. Respecto a las señales de alerta, subraya cambios de conducta, expresiones de desesperanza, intentos previos, aislamiento social o despedidas inusuales. “Toda manifestación de querer morir debe tomarse en serio, incluso cuando parece un llamado de atención”, enfatiza. Para la especialista, la prevención requiere un trabajo conjunto de familia, escuelas, universidades, trabajo y medios. En Chile existen herramientas como la línea telefónica 4141 y programas nacionales de intervención. No obstante, advierte la falta de especialistas en regiones, destacando el rol de la UA en la formación de psiquiatras y en la atención de pacientes en su hospital clínico. “La detección temprana y la acción oportuna salvan vidas. Prevenir el suicidio es tarea de toda la sociedad”, concluye la Dra. Vidal.
Las notificaciones por intentos de suicidio en la región de Antofagasta experimentaron un drástico incremento del 47% al comparar los 12 meses del año 2024 con tan solo los primeros 10 meses del 2025. El número de casos reportados creció de 351 a 515, según datos entregados por la Secretaría Regional Ministerial (Seremi) de Salud. Ante esto, el Secretario Regional Ministerial de Salud, Alberto Godoy, detalló que la mitad de los casos notificados se concentran en un rango etario sensible: personas entre 10 y 23 años. Desglosando las cifras de enero a octubre de 2025, se registraron 49 intentos en menores de 10 a 14 años, 139 en el grupo de 15 a 19 años, y 103 en jóvenes de 20 a 24 años. Asimismo, Godoy explicó que parte de este aumento estadístico se debe a un exhaustivo trabajo de abogacía realizado por la Unidad de Epidemiología de enfermedades no transmisibles de la Seremi con diversos recintos de salud. Dado que no existe una obligación legal para que los establecimientos informen sobre los intentos de suicidio, la entidad desarrolló una intensa labor de concientización y acompañamiento para lograr un compromiso de notificación por parte de los delegados de epidemiología. Contar con datos más fidedignos y completos, que abarcan personas de 10 a 87 años, permite a la autoridad focalizar mejor las acciones preventivas. Los grupos etarios con mayor incidencia en 2025 (15-19, 20-24 y 25-29 años) coinciden con el patrón observado durante 2024. La Seremi de Salud destacó que en la gran mayoría de los casos subyace un componente de depresión, una patología cubierta por el Sistema de Garantías Explícitas en Salud (GES). Ante este escenario, la autoridad sanitaria reiteró la responsabilidad fundamental que recae en padres, familiares y amigos de generar espacios de conversación y confianza. Es necesario hacer todo lo posible por llegar al corazón de los seres queridos y lograr que nos cuenten qué les ocurre, evaluando la eventual intervención de un especialista, enfatizó Godoy. Finalmente, la Seremi recordó a la comunidad las líneas de ayuda disponibles del Ministerio de Salud: la línea *4141, activa las 24 horas del día, los 7 días de la semana, para la prevención de suicidio y atención de cuadros ansiosos o depresivos, y el call center Salud Responde (600-360-7777), con el mismo horario de servicio.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), cada año cerca de 727 mil personas mueren por suicidio, situándolo como una de las principales causas de muerte en la juventud. En 2021 fue la tercera causa de fallecimiento en jóvenes de 15 a 29 años a nivel global y, en Chile, ocupa el segundo lugar en ese mismo rango etario. Aunque suele asociarse a países desarrollados, el 73% de los suicidios ocurren en naciones de ingresos bajos y medios. La Dra. María Fernanda Vidal, académica de la Universidad de Antofagasta y psiquiatra del Hospital Clínico Universitario, explica que “la conducta suicida es la expresión de un profundo malestar, donde la persona percibe que terminar con su vida es la única salida”. Entre los principales factores de riesgo menciona depresión, ansiedad, consumo problemático de drogas, ausencia de redes de apoyo, acoso escolar, problemas económicos o enfermedades crónicas. Respecto a las señales de alerta, subraya cambios de conducta, expresiones de desesperanza, intentos previos, aislamiento social o despedidas inusuales. “Toda manifestación de querer morir debe tomarse en serio, incluso cuando parece un llamado de atención”, enfatiza. Para la especialista, la prevención requiere un trabajo conjunto de familia, escuelas, universidades, trabajo y medios. En Chile existen herramientas como la línea telefónica 4141 y programas nacionales de intervención. No obstante, advierte la falta de especialistas en regiones, destacando el rol de la UA en la formación de psiquiatras y en la atención de pacientes en su hospital clínico. “La detección temprana y la acción oportuna salvan vidas. Prevenir el suicidio es tarea de toda la sociedad”, concluye la Dra. Vidal.