La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) confirmó la causa del trágico accidente aéreo que cobró la vida del expresidente Sebastián Piñera el 6 de febrero de 2024 en el Lago Ranco. El informe final, de 86 páginas, concluyó que el deceso del exmandatario se debió a la pérdida de orientación visual generada por un fenómeno conocido como flash fogging: un empañamiento interno y súbito del parabrisas de su helicóptero Robinson R44 II (matrícula CC-PHP). Según el documento N° 2047-24, la condensación bloqueó completamente la visibilidad del piloto al mando, lo que le provocó una desorientación espacial y un descenso inadvertido hasta impactar la superficie del lago, a solo 172 metros del punto de despegue. Además, el informe establece que, a pesar de las versiones iniciales, el accidente no se debió a fallas mecánicas, estructurales, ni a condiciones meteorológicas adversas. Las conclusiones son categóricas:La aeronave se encontraba en condiciones aeronavegables. El piloto contaba con sus licencias y habilitaciones vigentes. Las condiciones meteorológicas eran óptimas para vuelo visual. Ante esto, el fenómeno del empañamiento se produjo por el contraste de temperatura y humedad al interior de la cabina, sumado a que las ventilaciones laterales estaban cerradas. Los tres pasajeros que lograron sobrevivir (su hermana Magdalena Piñera, Ignacio Guerrero y su hijo Bautista Guerrero) relataron que, una vez en vuelo,el parabrisas de la cabina quedó completamente empañado, dificultando la visibilidad. Asimismo, el expresidente, de 74 años y con una experiencia de 569 horas de vuelo, intentó volar cerca de la orilla para tener una mejor visión, pero la maniobra no fue suficiente.La pérdida inadvertida de las referencias visuales externas derivó en un descenso no percibido por el piloto, originando el impacto. Para detallar, la investigación descartó cualquier otra variable. El helicóptero estaba con su Certificado de Aeronavegabilidad vigente hasta 2025 y el último mantenimiento obligatorio se había realizado en agosto de 2023. Además, los análisis toxicológicos y de alcoholemia realizados a Piñera resultaron negativos (0,00 gramos por litro de alcohol en la sangre). El documento clasifica el suceso como unVuelo controlado contra el terreno (CFIT), indicando que la aeronave impactó sin pérdida de control, pero sí de orientación. Piñera no logró abandonar la aeronave, falleciendo en el lugar por asfixia por inmersión. Finalmente, la DGAC concluye con una recomendación de seguridad operacional parareforzar la instrucción de pilotos privados sobre el uso de sistemas de ventilación y calefacción de cabina para evitar condensación y la toma de decisiones en vuelo visual bajo condiciones marginales.
La Dirección General de Aeronáutica Civil (DGAC) confirmó la causa del trágico accidente aéreo que cobró la vida del expresidente Sebastián Piñera el 6 de febrero de 2024 en el Lago Ranco. El informe final, de 86 páginas, concluyó que el deceso del exmandatario se debió a la pérdida de orientación visual generada por un fenómeno conocido como flash fogging: un empañamiento interno y súbito del parabrisas de su helicóptero Robinson R44 II (matrícula CC-PHP). Según el documento N° 2047-24, la condensación bloqueó completamente la visibilidad del piloto al mando, lo que le provocó una desorientación espacial y un descenso inadvertido hasta impactar la superficie del lago, a solo 172 metros del punto de despegue. Además, el informe establece que, a pesar de las versiones iniciales, el accidente no se debió a fallas mecánicas, estructurales, ni a condiciones meteorológicas adversas. Las conclusiones son categóricas:La aeronave se encontraba en condiciones aeronavegables. El piloto contaba con sus licencias y habilitaciones vigentes. Las condiciones meteorológicas eran óptimas para vuelo visual. Ante esto, el fenómeno del empañamiento se produjo por el contraste de temperatura y humedad al interior de la cabina, sumado a que las ventilaciones laterales estaban cerradas. Los tres pasajeros que lograron sobrevivir (su hermana Magdalena Piñera, Ignacio Guerrero y su hijo Bautista Guerrero) relataron que, una vez en vuelo,el parabrisas de la cabina quedó completamente empañado, dificultando la visibilidad. Asimismo, el expresidente, de 74 años y con una experiencia de 569 horas de vuelo, intentó volar cerca de la orilla para tener una mejor visión, pero la maniobra no fue suficiente.La pérdida inadvertida de las referencias visuales externas derivó en un descenso no percibido por el piloto, originando el impacto. Para detallar, la investigación descartó cualquier otra variable. El helicóptero estaba con su Certificado de Aeronavegabilidad vigente hasta 2025 y el último mantenimiento obligatorio se había realizado en agosto de 2023. Además, los análisis toxicológicos y de alcoholemia realizados a Piñera resultaron negativos (0,00 gramos por litro de alcohol en la sangre). El documento clasifica el suceso como unVuelo controlado contra el terreno (CFIT), indicando que la aeronave impactó sin pérdida de control, pero sí de orientación. Piñera no logró abandonar la aeronave, falleciendo en el lugar por asfixia por inmersión. Finalmente, la DGAC concluye con una recomendación de seguridad operacional parareforzar la instrucción de pilotos privados sobre el uso de sistemas de ventilación y calefacción de cabina para evitar condensación y la toma de decisiones en vuelo visual bajo condiciones marginales.