Fue durante la jornada de este jueves, que el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, se refirió al mandatario recientemente electo de Estados Unidos, Donald Trump. En su alocución el líder ruso abordó variados temas sobre el actual escenario en medio de los conflicto bélicos que azotan al mundo, sumado a su visión sobre países con los que siempre han mantenido diferencias y/o rivalidades. En ese contexto, afirmó que el magnate es alguien ''inteligente y capaz de resolver problemas'', en plena escalada de tensiones entre Moscú y las potencias occidentales. El dirigente republicano, que volverá en enero a la Oficina Oval tras haber ejercido un primer mandato en 2017-2021, es una persona inteligente, ya bastante experimentada, comentó Putin en una rueda de prensa en Kazajistán. Por otra parte, refirió que creo que encontrará una solución, agregó, sin especificar a qué tipo de problemas hacía alusión. No obstante lo anterior, manifestó su preocupación por Trump luego de los ataques que sufrió durante la campaña a mediados del año en curso. Contra Trump se utilizaron métodos de lucha totalmente incivilizados, incluso hasta reiterados intentos de asesinato. En mi opinión, él todavía corre peligro”, profundizó. “No solo a él lo sometieron a procesos judiciales y acusaciones humillantes y sin fundamentos, sino que también atacaron a los miembros de su familia, a sus hijos”. “En Rusia ni los bandidos hacen algo así”, sostuvo, al señalar que cuando las bandas criminales rusas luchan entre sí “no tocan a las mujeres y a los niños, les dejan en paz”. “Es algo muy asqueroso que subraya una vez más toda la decadencia del actual sistema político estadounidense ”, fustigó. Con todo, cabe recordar que hace algunas semanas, Putin felicitó al próximo jefe de Estado americano luego de ganar en las elecciones y confesó que lo que Trump había dicho en campaña sobre la resolución de la crisis ucraniana merecía atención, luego de que el excandidato dijera que podía lograr la paz en Ucrania en 24 horas. En esta misma línea enfatizó en que si La Casa Blanca quiere reanudar los contactos, el Kremlin estaba dispuesta a discutirlo.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha dejado claro que uno de sus objetivos principales en un segundo mandato será implementar un programa masivo de deportación de inmigrantes indocumentados, algo que calificó como un pilar fundamental de su campaña. Según declaraciones recientes de fuentes cercanas a su equipo de transición, el enfoque inicial estaría dirigido a los inmigrantes con antecedentes criminales, una medida que ha generado preocupación entre las comunidades afectadas. Ante esto, el número de inmigrantes indocumentados en EE. UU. es significativo, con unos 11 millones estimados, muchos de los cuales provienen de países como México, El Salvador, India y Guatemala. Aunque la mayoría de los indocumentados no tiene antecedentes criminales, un informe reciente indicó que la tasa de detención por delitos violentos o de drogas es mucho más baja entre los inmigrantes indocumentados que entre los ciudadanos estadounidenses. Durante su primer mandato, Trump deportó a más de 1,5 millones de personas, y su equipo asegura que el ritmo será aún más rápido en el segundo mandato. Tom Homan, exdirector interino del ICE, ha señalado que las deportaciones serán más selectivas, pero las familias de estatus mixto, es decir, aquellas con miembros ciudadanos y no ciudadanos, también podrían verse afectadas. Además, el futuro de los llamados “soñadores”, inmigrantes que llegaron a EE. UU. siendo niños y están protegidos por el programa DACA, sigue siendo incierto. Aunque algunos de estos jóvenes gozan de protección temporal, Trump podría decidir tomar medidas más drásticas contra ellos, algo que podría desencadenar controversias a nivel político. En cuanto a los recursos, Trump está considerando declarar una emergencia nacional para facilitar la expansión de espacios de detención y la implementación de medidas más estrictas en la frontera. A pesar de las promesas de acción rápida, defensores de los derechos de los inmigrantes alertan sobre los devastadores efectos de estas políticas, que podrían separar familias y afectar a millones de personas que han vivido en EE. UU. durante años. Con el inicio de su segundo mandato el 20 de enero, Trump apunta a restaurar las políticas migratorias de su primer gobierno, desafiando los enfoques más relajados del presidente Joe Biden. Mientras tanto, los funcionarios del ICE y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza aún no se han pronunciado sobre los posibles cambios.
Sin lugar a dudas el triunfo de Donald Trump en los comicios del 5 de noviembre continúa generando repercusiones. En el caso particular de Chile, se instaló en la opinión pública la posibilidad de que el ''gigante norteamericano'' deje sin efecto la Visa Waiver. Es por ese motivo, que la embajadora de Estados Unidos (EE.UU.) en nuestro país, Bernadette Meehan, señaló que la continuidad del programa Visa Waiver seguirá vigente siempre y cuando Chile ''cumpla con las metas que hemos abordado''. Dichas declaraciones se enmarcan dentro del contexto de las elecciones norteamericanas recientemente celebradas y el próximo cambio de gobierno en enero de 2025 cuando Donald Trump vuelva a la Casa Blanca como Presidente electo. Cabe recordar que la Visa Waiver es un convenio entre ambos países, que permite a los chilenos y chilenas visitar EE.UU. por un plazo máximo de 90 días sin la necesidad de ser visado. De igual forma, la diplomática reconoció que Chile, bajo la administración del Presidente Gabriel Boric, ha logrado metas y los hitos que hemos acordado. Espero y creo que en el futuro próximo lo seguirán haciendo, puntualizó. Respecto a los posibles riesgos para el Tratado de Libre Comercio (TLC) bajo el nuevo gobierno del republicano, la autoridad apuntó a que l a respuesta llegará de la mano del mandatario electo. No hablo por la administración de Trump. En este momento, nadie más que el equipo de transición puede hablar sobre cuáles serán las políticas del Presidente Trump, cerró.
Fue durante la jornada de este jueves, que el Presidente de Rusia, Vladímir Putin, se refirió al mandatario recientemente electo de Estados Unidos, Donald Trump. En su alocución el líder ruso abordó variados temas sobre el actual escenario en medio de los conflicto bélicos que azotan al mundo, sumado a su visión sobre países con los que siempre han mantenido diferencias y/o rivalidades. En ese contexto, afirmó que el magnate es alguien ''inteligente y capaz de resolver problemas'', en plena escalada de tensiones entre Moscú y las potencias occidentales. El dirigente republicano, que volverá en enero a la Oficina Oval tras haber ejercido un primer mandato en 2017-2021, es una persona inteligente, ya bastante experimentada, comentó Putin en una rueda de prensa en Kazajistán. Por otra parte, refirió que creo que encontrará una solución, agregó, sin especificar a qué tipo de problemas hacía alusión. No obstante lo anterior, manifestó su preocupación por Trump luego de los ataques que sufrió durante la campaña a mediados del año en curso. Contra Trump se utilizaron métodos de lucha totalmente incivilizados, incluso hasta reiterados intentos de asesinato. En mi opinión, él todavía corre peligro”, profundizó. “No solo a él lo sometieron a procesos judiciales y acusaciones humillantes y sin fundamentos, sino que también atacaron a los miembros de su familia, a sus hijos”. “En Rusia ni los bandidos hacen algo así”, sostuvo, al señalar que cuando las bandas criminales rusas luchan entre sí “no tocan a las mujeres y a los niños, les dejan en paz”. “Es algo muy asqueroso que subraya una vez más toda la decadencia del actual sistema político estadounidense ”, fustigó. Con todo, cabe recordar que hace algunas semanas, Putin felicitó al próximo jefe de Estado americano luego de ganar en las elecciones y confesó que lo que Trump había dicho en campaña sobre la resolución de la crisis ucraniana merecía atención, luego de que el excandidato dijera que podía lograr la paz en Ucrania en 24 horas. En esta misma línea enfatizó en que si La Casa Blanca quiere reanudar los contactos, el Kremlin estaba dispuesta a discutirlo.
El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, ha dejado claro que uno de sus objetivos principales en un segundo mandato será implementar un programa masivo de deportación de inmigrantes indocumentados, algo que calificó como un pilar fundamental de su campaña. Según declaraciones recientes de fuentes cercanas a su equipo de transición, el enfoque inicial estaría dirigido a los inmigrantes con antecedentes criminales, una medida que ha generado preocupación entre las comunidades afectadas. Ante esto, el número de inmigrantes indocumentados en EE. UU. es significativo, con unos 11 millones estimados, muchos de los cuales provienen de países como México, El Salvador, India y Guatemala. Aunque la mayoría de los indocumentados no tiene antecedentes criminales, un informe reciente indicó que la tasa de detención por delitos violentos o de drogas es mucho más baja entre los inmigrantes indocumentados que entre los ciudadanos estadounidenses. Durante su primer mandato, Trump deportó a más de 1,5 millones de personas, y su equipo asegura que el ritmo será aún más rápido en el segundo mandato. Tom Homan, exdirector interino del ICE, ha señalado que las deportaciones serán más selectivas, pero las familias de estatus mixto, es decir, aquellas con miembros ciudadanos y no ciudadanos, también podrían verse afectadas. Además, el futuro de los llamados “soñadores”, inmigrantes que llegaron a EE. UU. siendo niños y están protegidos por el programa DACA, sigue siendo incierto. Aunque algunos de estos jóvenes gozan de protección temporal, Trump podría decidir tomar medidas más drásticas contra ellos, algo que podría desencadenar controversias a nivel político. En cuanto a los recursos, Trump está considerando declarar una emergencia nacional para facilitar la expansión de espacios de detención y la implementación de medidas más estrictas en la frontera. A pesar de las promesas de acción rápida, defensores de los derechos de los inmigrantes alertan sobre los devastadores efectos de estas políticas, que podrían separar familias y afectar a millones de personas que han vivido en EE. UU. durante años. Con el inicio de su segundo mandato el 20 de enero, Trump apunta a restaurar las políticas migratorias de su primer gobierno, desafiando los enfoques más relajados del presidente Joe Biden. Mientras tanto, los funcionarios del ICE y la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza aún no se han pronunciado sobre los posibles cambios.
Sin lugar a dudas el triunfo de Donald Trump en los comicios del 5 de noviembre continúa generando repercusiones. En el caso particular de Chile, se instaló en la opinión pública la posibilidad de que el ''gigante norteamericano'' deje sin efecto la Visa Waiver. Es por ese motivo, que la embajadora de Estados Unidos (EE.UU.) en nuestro país, Bernadette Meehan, señaló que la continuidad del programa Visa Waiver seguirá vigente siempre y cuando Chile ''cumpla con las metas que hemos abordado''. Dichas declaraciones se enmarcan dentro del contexto de las elecciones norteamericanas recientemente celebradas y el próximo cambio de gobierno en enero de 2025 cuando Donald Trump vuelva a la Casa Blanca como Presidente electo. Cabe recordar que la Visa Waiver es un convenio entre ambos países, que permite a los chilenos y chilenas visitar EE.UU. por un plazo máximo de 90 días sin la necesidad de ser visado. De igual forma, la diplomática reconoció que Chile, bajo la administración del Presidente Gabriel Boric, ha logrado metas y los hitos que hemos acordado. Espero y creo que en el futuro próximo lo seguirán haciendo, puntualizó. Respecto a los posibles riesgos para el Tratado de Libre Comercio (TLC) bajo el nuevo gobierno del republicano, la autoridad apuntó a que l a respuesta llegará de la mano del mandatario electo. No hablo por la administración de Trump. En este momento, nadie más que el equipo de transición puede hablar sobre cuáles serán las políticas del Presidente Trump, cerró.