El alcalde Sacha Razmilic se refirió a esta iniciativa, que ya lleva varios meses en marcha, destacando que el plan busca recuperar los espacios públicos y generar un cambio en la conducta ciudadana.Seguimos con este plan que ya lleva varios meses, retirando de forma sistemática los vehículos abandonados y mal estacionados, particularmente, en calles con transporte público, paraderos y pasos de cebra para que el tránsito fluya con mayor rapidez. Lo hemos dicho y vamos a seguir insistiendo, las personas que cumplen las reglas y se estacionan bien no tienen nada que temer, pero quienes lo hagan mal se arriesgan a que nos llevemos su auto con la grúa”, señaló el jefe comunal. Por su parte, el director de Seguridad Ciudadana, Gonzalo Castro, enfatizó que el objetivo es generar un cambio de conducta en la ciudadanía.En este momento estamos retirando vehículos que obstaculizan los paraderos de la locomoción colectiva o que están contra la señalética instalada por la municipalidad. Esto significa un alto costo para los propietarios que no cumplen la norma, llamamos a respetar la normativa vial, porque seguiremos trabajando para ordenar nuestra ciudad, indicó. Ante esto, la municipalidad ha subrayado el alto costo que deben asumir los conductores que estacionan en lugares prohibidos. Además de la multa y la citación al Juzgado de Policía local, los infractores deben pagar por el servicio de grúa y el corralón municipal. Finalmente, el servicio de grúa tiene un valor de 1,7 UTM (aproximadamente $116.000) y debe ser cancelado para que el vehículo pueda ser liberado. Una vez dictada la sentencia, comienza el cobro diario por el corralón municipal, que oscila entre $2.750 y $13.800, dependiendo del tipo de vehículo. La municipalidad reitera su llamado a la responsabilidad y el respeto de las normas de tránsito, asegurando que estos operativos continuarán de manera sistemática para lograr una ciudad más ordenada y segura.
Las nuevas obras de ampliación en el corralón municipal de Antofagasta duplicaron su capacidad de 350 a 700 espacios, permitiendo que la administración de Sacha Razmilic ponga en marcha su plan de ordenamiento comunal. El proyecto, con una inversión de casi 969 millones de pesos, permitirá el uso de las tres grúas municipales para remover vehículos abandonados o mal estacionados y liberar espacio en las calles de la ciudad. Ante esto, el alcalde Sacha Razmilic destacó que la ampliación del corralón es un paso firme en su plan de ordenamiento, el cual busca mejorar las conductas cívicas antes que sancionar. El nuevo espacio, que pasó de 11,000 a 21,000 metros cuadrados, permitirá el retiro sin limitaciones de vehículos abandonados, motos y automóviles mal estacionados, además de decomisar toldos del comercio ambulante. Asimismo, la iniciativa fue recibida positivamente por el coronel de Carabineros y prefecto de Antofagasta, Héctor Cabrera, quien indicó que facilitará la labor policial. El aumento de capacidad permitirá trasladar vehículos a disposición de los tribunales y aumentar las fiscalizaciones que impliquen el retiro de automóviles sin la documentación necesaria. Además de la ampliación, las obras incluyeron mejoras importantes como un cierre perimetral de hormigón, la remodelación de las instalaciones existentes, un baño con accesibilidad universal y un proyecto eléctrico a través de un sistema fotovoltaico para aprovechar la luz natural y reducir el impacto ambiental. El director de Administración y Finanzas del municipio, Alfredo Fuentes, detalló que el proceso para retirar un vehículo del corralón incluye el pago de una multa en el juzgado de policía local y el pago del bodegaje en el Departamento de Rentas, antes de poder retirar el automóvil. Así también, concejales como Camilo Kong e Ignacio Pozo también estuvieron presentes en la inauguración. Kong resaltó la importancia de considerar a las personas que trabajan en estos espacios, mientras que Pozo enfatizó que esta iniciativa es un hito para descongestionar el centro de la ciudad y que las grúas retirarán los vehículos si los vecinos no cambian sus conductas. Finalmente, el presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA), Marko Razmilic, asistió al evento y expresó la importancia de liberar las calles de autos abandonados, un problema que afecta a la ciudad.
El alcalde Sacha Razmilic se refirió a esta iniciativa, que ya lleva varios meses en marcha, destacando que el plan busca recuperar los espacios públicos y generar un cambio en la conducta ciudadana.Seguimos con este plan que ya lleva varios meses, retirando de forma sistemática los vehículos abandonados y mal estacionados, particularmente, en calles con transporte público, paraderos y pasos de cebra para que el tránsito fluya con mayor rapidez. Lo hemos dicho y vamos a seguir insistiendo, las personas que cumplen las reglas y se estacionan bien no tienen nada que temer, pero quienes lo hagan mal se arriesgan a que nos llevemos su auto con la grúa”, señaló el jefe comunal. Por su parte, el director de Seguridad Ciudadana, Gonzalo Castro, enfatizó que el objetivo es generar un cambio de conducta en la ciudadanía.En este momento estamos retirando vehículos que obstaculizan los paraderos de la locomoción colectiva o que están contra la señalética instalada por la municipalidad. Esto significa un alto costo para los propietarios que no cumplen la norma, llamamos a respetar la normativa vial, porque seguiremos trabajando para ordenar nuestra ciudad, indicó. Ante esto, la municipalidad ha subrayado el alto costo que deben asumir los conductores que estacionan en lugares prohibidos. Además de la multa y la citación al Juzgado de Policía local, los infractores deben pagar por el servicio de grúa y el corralón municipal. Finalmente, el servicio de grúa tiene un valor de 1,7 UTM (aproximadamente $116.000) y debe ser cancelado para que el vehículo pueda ser liberado. Una vez dictada la sentencia, comienza el cobro diario por el corralón municipal, que oscila entre $2.750 y $13.800, dependiendo del tipo de vehículo. La municipalidad reitera su llamado a la responsabilidad y el respeto de las normas de tránsito, asegurando que estos operativos continuarán de manera sistemática para lograr una ciudad más ordenada y segura.
Las nuevas obras de ampliación en el corralón municipal de Antofagasta duplicaron su capacidad de 350 a 700 espacios, permitiendo que la administración de Sacha Razmilic ponga en marcha su plan de ordenamiento comunal. El proyecto, con una inversión de casi 969 millones de pesos, permitirá el uso de las tres grúas municipales para remover vehículos abandonados o mal estacionados y liberar espacio en las calles de la ciudad. Ante esto, el alcalde Sacha Razmilic destacó que la ampliación del corralón es un paso firme en su plan de ordenamiento, el cual busca mejorar las conductas cívicas antes que sancionar. El nuevo espacio, que pasó de 11,000 a 21,000 metros cuadrados, permitirá el retiro sin limitaciones de vehículos abandonados, motos y automóviles mal estacionados, además de decomisar toldos del comercio ambulante. Asimismo, la iniciativa fue recibida positivamente por el coronel de Carabineros y prefecto de Antofagasta, Héctor Cabrera, quien indicó que facilitará la labor policial. El aumento de capacidad permitirá trasladar vehículos a disposición de los tribunales y aumentar las fiscalizaciones que impliquen el retiro de automóviles sin la documentación necesaria. Además de la ampliación, las obras incluyeron mejoras importantes como un cierre perimetral de hormigón, la remodelación de las instalaciones existentes, un baño con accesibilidad universal y un proyecto eléctrico a través de un sistema fotovoltaico para aprovechar la luz natural y reducir el impacto ambiental. El director de Administración y Finanzas del municipio, Alfredo Fuentes, detalló que el proceso para retirar un vehículo del corralón incluye el pago de una multa en el juzgado de policía local y el pago del bodegaje en el Departamento de Rentas, antes de poder retirar el automóvil. Así también, concejales como Camilo Kong e Ignacio Pozo también estuvieron presentes en la inauguración. Kong resaltó la importancia de considerar a las personas que trabajan en estos espacios, mientras que Pozo enfatizó que esta iniciativa es un hito para descongestionar el centro de la ciudad y que las grúas retirarán los vehículos si los vecinos no cambian sus conductas. Finalmente, el presidente de la Asociación de Industriales de Antofagasta (AIA), Marko Razmilic, asistió al evento y expresó la importancia de liberar las calles de autos abandonados, un problema que afecta a la ciudad.