Entre las 11:00 de la mañana y 17:00 horas, es cuando deberías evitar exponerte al sol, según información proporcionada por la Seremi de Salud durante una feria preventiva realizada este jueves en el Balneario Municipal de Antofagasta. La seremi de Salud, Jessica Bravo, recuerda que durante las altas temperaturas es necesario mantener la estrategia de hidratación, bloqueador y cubrimiento. Según la bibliografía médica, la hidratación resulta vital y beneficiosa no sólo desde el punto de vista físico, sino también desde el ámbito del buen funcionamiento cerebral, puntualiza. Para asistir a playas, practicar actividad física y otras actividades al aire libre, es necesario aplicar bloqueador solar en la piel de factor 30 o más, siempre media hora antes de exponerse al sol y reaplicar cada dos horas o menos, en caso de sudar demasiado o sumergirse en el agua. También es importante cubrir el cuerpo con el uso de un gorro que idealmente proteja el cuello, junto con ropa clara que aleje la concentración de calor. La exposición excesiva a altas temperaturas conlleva efectos en la salud cuando la temperatura corporal se eleva por sobre los 38°C. Los riesgos abarcan desde lo más leve como manifestaciones cutáneas tipo miliaria, hasta lo más grave representado por golpes de calor, asociados a afectación del sistema nervioso central, pasando por edema generalizado, calambres, síncope por calor, estrés por calor e incluso la muerte. Cáncer a la piel y días nublados El cáncer a la piel, es el tipo de cáncer que presenta mayor incidencia en la Región de Antofagasta tanto entre hombres como mujeres, con una tasa bruta de 61,8 y 65,2 por cada 100 mil habitantes, respectivamente. Al respecto, Juan Carlos Galaz, jefe (s) del Departamento de Salud Pública de la Seremi, explica esta alta incidencia no es un tema exclusivo de la Región de Antofagasta, sino que se da de la misma forma en otras regiones de nuestro país y otros países. Lo bueno es que no es un cáncer que tenga una alta letalidad cuando hablamos de cáncer no melanoma. Los efectos de la radiación solar sobre la piel son acumulativos, por lo tanto es mejor no exponer a los niños pequeños al sol. La radiación está presente todos los días del año, inclusive aquellos que aparecen como nublados, reitera Galaz. ☀️🕶️Frente las altas temperaturas en este verano, sigue estas recomendaciones para cuidar tu salud. pic.twitter.com/wAqDtWv21B — Seremi Salud Antofagasta (@SeremiSalud2) January 17, 2024
El interior de un coche puede alcanzar los 50 grados centígrados si se deja al sol durante una hora en verano. En los momentos centrales del día, en dos horas un automóvil al sol puede alcanzar casi los 60 grados cuando en el exterior la temperatura es de 32 grados. Además, el calor no solo puede afectar a los pasajeros del coche, sino también al propio vehículo. Según recoge en un comunicado la empresa de renting y gestión de flotas ALD Automotive, cuando la temperatura supera los 40 grados, aumenta la intensidad de evaporación del aceite del motor del coche, por lo que es importante revisar el nivel para que el sistema no pierda eficacia. Las altas temperaturas hacen que los neumáticos se dilaten más, por lo que es recomendable llevarlos con la presión mínima establecida, con el fin de evitar pinchazos. También cabe verificar el nivel de líquido refrigerante del motor, para evitar que este se caliente el mismo. Así pues, con el fin de prevenir percances en la carretera, sobre todo a las puertas de la operación salida de vacaciones y del aumento de desplazamientos previsto para las próximas semanas lo mejor es tener a punto nuestro coche con una revisión en nuestro InterTaller más cercano. ¿Qué revisar? Nivel de aceite : cuando la temperatura supera los 40 grados, aumenta la intensidad de evaporación, por lo que es importante revisar el nivel para que el sistema no pierda eficacia. Dilatación de los neumáticos : con el calor, el aire de los neumáticos tiende a dilatarse, por lo que es importante llevarlos con la presión mínima recomendada en estos meses, con el fin de evitar pinchazos. Temperatura del motor : es importante verificar el nivel del líquido de refrigeración para evitar que el motor se recaliente más de lo normal durante los viajes, pues una temperatura excesivamente elevada puede incrementar la pérdida de potencia en el motor hasta en un 15%. Sistema de climatización : con temperaturas extremadamente altas en el exterior, el sistema tiene que trabajar al máximo y forzarlo sin estar a punto podría aumentar el riesgo de fallos. Asimismo, antes de poner el sistema en marcha, se recomienda igualar la temperatura exterior e interior para evitar sobrecargas de uso. En este sentido, cuando se para el vehículo, es importante apagarlo, ya que puede descargarse la batería. Líquido de frenos : es importante comprobar su estado y nivel, pues es muy sensible a la temperatura y podría provocar una pérdida de eficacia a la hora de frenar. Atención a los conductores Además de poner a punto el vehículo, el conductor también tiene que estar preparado para hacer frente al calor extremo en sus desplazamientos, así como conocer una serie de recomendaciones para facilitar la conducción con temperaturas altas. Bebe agua y evita comidas copiosas : con las temperaturas altas aumenta el riesgo de somnolencia y deshidratación, hasta el punto de que puede provocar los mismos efectos que el estado de embriaguez, por eso es necesario beber agua, evitar comidas pesadas y mantener una temperatura fresca del habitáculo. Evita las horas centrales : siempre que sea posible, es recomendable conducir en los momentos menos calurosos del día, evitando el mediodía y, si puede ser, sin que el sol dé de cara al conductor, ya que se limita mucho la visibilidad. Aparca a la sombra : a la hora de estacionar el vehículo es importante buscar la sombra. Además de que el calor extremo daña la carrocería, el interior también sufre las consecuencias de estas temperaturas. Además, a la hora de volver a arrancar el vehículo, el conductor tendrá que invertir menos tiempo en adecuar la temperatura si el vehículo estaba a la sombra.
El golpe de calor es una condición seria que puede ocurrir si nos exponemos demasiado al sol, y saber cómo manejarlo es esencial para nuestro bienestar. Reconocer un golpe de calor: El golpe de calor se presenta cuando nuestro cuerpo es incapaz de regular su temperatura por sí solo. Los síntomas iniciales incluyen insolación, sarpullidos y calambres. Si estos signos se agravan, pueden llevar a la confusión, pérdida de consciencia y, en situaciones extremas, a convulsiones. Observar cambios en la piel, que puede tornarse caliente y seca, es vital para la rápida identificación y toma de medidas. Medidas preventivas y de reacción: Atención médica inmediata: si sospechas de un golpe de calor, es primordial buscar ayuda profesional de inmediato. No subestimes los síntomas. Compañía y cuidado: permanece junto a la persona afectada mientras esperas asistencia. Tu presencia puede ser reconfortante y vital en caso de que su condición empeore. Refrescar activamente: mientras llega la ayuda, intenta bajar la temperatura corporal de la persona llevándola a un lugar fresco y sombreado y aplicando agua fría o paños húmedos. Cuidado con la hidratación: ofrece líquidos si la persona está consciente y puede beber, pero nunca fuerces la ingesta si muestra dificultad para tragar. Primeros auxilios: si estás capacitado, y es necesario, aplica primeros auxilios o reanimación cardiopulmonar (RCP). Atención especial para personas vulnerables: Algunas personas tienen un riesgo más alto de sufrir un golpe de calor. Es esencial que los adultos mayores, mujeres embarazadas y personas con ciertas condiciones de salud, como diabetes o hipertensión, tomen precauciones extra. La prevención es clave para disfrutar del verano con salud. Mantén un ojo en los más vulnerables, reconoce los signos de alarma del golpe de calor y actúa con rapidez si es necesario. Recuerda, en el calor del verano, tu seguridad y la de tus seres queridos es lo más fresco que puedes preservar. ¡Disfruta del sol con seguridad!
Entre las 11:00 de la mañana y 17:00 horas, es cuando deberías evitar exponerte al sol, según información proporcionada por la Seremi de Salud durante una feria preventiva realizada este jueves en el Balneario Municipal de Antofagasta. La seremi de Salud, Jessica Bravo, recuerda que durante las altas temperaturas es necesario mantener la estrategia de hidratación, bloqueador y cubrimiento. Según la bibliografía médica, la hidratación resulta vital y beneficiosa no sólo desde el punto de vista físico, sino también desde el ámbito del buen funcionamiento cerebral, puntualiza. Para asistir a playas, practicar actividad física y otras actividades al aire libre, es necesario aplicar bloqueador solar en la piel de factor 30 o más, siempre media hora antes de exponerse al sol y reaplicar cada dos horas o menos, en caso de sudar demasiado o sumergirse en el agua. También es importante cubrir el cuerpo con el uso de un gorro que idealmente proteja el cuello, junto con ropa clara que aleje la concentración de calor. La exposición excesiva a altas temperaturas conlleva efectos en la salud cuando la temperatura corporal se eleva por sobre los 38°C. Los riesgos abarcan desde lo más leve como manifestaciones cutáneas tipo miliaria, hasta lo más grave representado por golpes de calor, asociados a afectación del sistema nervioso central, pasando por edema generalizado, calambres, síncope por calor, estrés por calor e incluso la muerte. Cáncer a la piel y días nublados El cáncer a la piel, es el tipo de cáncer que presenta mayor incidencia en la Región de Antofagasta tanto entre hombres como mujeres, con una tasa bruta de 61,8 y 65,2 por cada 100 mil habitantes, respectivamente. Al respecto, Juan Carlos Galaz, jefe (s) del Departamento de Salud Pública de la Seremi, explica esta alta incidencia no es un tema exclusivo de la Región de Antofagasta, sino que se da de la misma forma en otras regiones de nuestro país y otros países. Lo bueno es que no es un cáncer que tenga una alta letalidad cuando hablamos de cáncer no melanoma. Los efectos de la radiación solar sobre la piel son acumulativos, por lo tanto es mejor no exponer a los niños pequeños al sol. La radiación está presente todos los días del año, inclusive aquellos que aparecen como nublados, reitera Galaz. ☀️🕶️Frente las altas temperaturas en este verano, sigue estas recomendaciones para cuidar tu salud. pic.twitter.com/wAqDtWv21B — Seremi Salud Antofagasta (@SeremiSalud2) January 17, 2024
El interior de un coche puede alcanzar los 50 grados centígrados si se deja al sol durante una hora en verano. En los momentos centrales del día, en dos horas un automóvil al sol puede alcanzar casi los 60 grados cuando en el exterior la temperatura es de 32 grados. Además, el calor no solo puede afectar a los pasajeros del coche, sino también al propio vehículo. Según recoge en un comunicado la empresa de renting y gestión de flotas ALD Automotive, cuando la temperatura supera los 40 grados, aumenta la intensidad de evaporación del aceite del motor del coche, por lo que es importante revisar el nivel para que el sistema no pierda eficacia. Las altas temperaturas hacen que los neumáticos se dilaten más, por lo que es recomendable llevarlos con la presión mínima establecida, con el fin de evitar pinchazos. También cabe verificar el nivel de líquido refrigerante del motor, para evitar que este se caliente el mismo. Así pues, con el fin de prevenir percances en la carretera, sobre todo a las puertas de la operación salida de vacaciones y del aumento de desplazamientos previsto para las próximas semanas lo mejor es tener a punto nuestro coche con una revisión en nuestro InterTaller más cercano. ¿Qué revisar? Nivel de aceite : cuando la temperatura supera los 40 grados, aumenta la intensidad de evaporación, por lo que es importante revisar el nivel para que el sistema no pierda eficacia. Dilatación de los neumáticos : con el calor, el aire de los neumáticos tiende a dilatarse, por lo que es importante llevarlos con la presión mínima recomendada en estos meses, con el fin de evitar pinchazos. Temperatura del motor : es importante verificar el nivel del líquido de refrigeración para evitar que el motor se recaliente más de lo normal durante los viajes, pues una temperatura excesivamente elevada puede incrementar la pérdida de potencia en el motor hasta en un 15%. Sistema de climatización : con temperaturas extremadamente altas en el exterior, el sistema tiene que trabajar al máximo y forzarlo sin estar a punto podría aumentar el riesgo de fallos. Asimismo, antes de poner el sistema en marcha, se recomienda igualar la temperatura exterior e interior para evitar sobrecargas de uso. En este sentido, cuando se para el vehículo, es importante apagarlo, ya que puede descargarse la batería. Líquido de frenos : es importante comprobar su estado y nivel, pues es muy sensible a la temperatura y podría provocar una pérdida de eficacia a la hora de frenar. Atención a los conductores Además de poner a punto el vehículo, el conductor también tiene que estar preparado para hacer frente al calor extremo en sus desplazamientos, así como conocer una serie de recomendaciones para facilitar la conducción con temperaturas altas. Bebe agua y evita comidas copiosas : con las temperaturas altas aumenta el riesgo de somnolencia y deshidratación, hasta el punto de que puede provocar los mismos efectos que el estado de embriaguez, por eso es necesario beber agua, evitar comidas pesadas y mantener una temperatura fresca del habitáculo. Evita las horas centrales : siempre que sea posible, es recomendable conducir en los momentos menos calurosos del día, evitando el mediodía y, si puede ser, sin que el sol dé de cara al conductor, ya que se limita mucho la visibilidad. Aparca a la sombra : a la hora de estacionar el vehículo es importante buscar la sombra. Además de que el calor extremo daña la carrocería, el interior también sufre las consecuencias de estas temperaturas. Además, a la hora de volver a arrancar el vehículo, el conductor tendrá que invertir menos tiempo en adecuar la temperatura si el vehículo estaba a la sombra.
El golpe de calor es una condición seria que puede ocurrir si nos exponemos demasiado al sol, y saber cómo manejarlo es esencial para nuestro bienestar. Reconocer un golpe de calor: El golpe de calor se presenta cuando nuestro cuerpo es incapaz de regular su temperatura por sí solo. Los síntomas iniciales incluyen insolación, sarpullidos y calambres. Si estos signos se agravan, pueden llevar a la confusión, pérdida de consciencia y, en situaciones extremas, a convulsiones. Observar cambios en la piel, que puede tornarse caliente y seca, es vital para la rápida identificación y toma de medidas. Medidas preventivas y de reacción: Atención médica inmediata: si sospechas de un golpe de calor, es primordial buscar ayuda profesional de inmediato. No subestimes los síntomas. Compañía y cuidado: permanece junto a la persona afectada mientras esperas asistencia. Tu presencia puede ser reconfortante y vital en caso de que su condición empeore. Refrescar activamente: mientras llega la ayuda, intenta bajar la temperatura corporal de la persona llevándola a un lugar fresco y sombreado y aplicando agua fría o paños húmedos. Cuidado con la hidratación: ofrece líquidos si la persona está consciente y puede beber, pero nunca fuerces la ingesta si muestra dificultad para tragar. Primeros auxilios: si estás capacitado, y es necesario, aplica primeros auxilios o reanimación cardiopulmonar (RCP). Atención especial para personas vulnerables: Algunas personas tienen un riesgo más alto de sufrir un golpe de calor. Es esencial que los adultos mayores, mujeres embarazadas y personas con ciertas condiciones de salud, como diabetes o hipertensión, tomen precauciones extra. La prevención es clave para disfrutar del verano con salud. Mantén un ojo en los más vulnerables, reconoce los signos de alarma del golpe de calor y actúa con rapidez si es necesario. Recuerda, en el calor del verano, tu seguridad y la de tus seres queridos es lo más fresco que puedes preservar. ¡Disfruta del sol con seguridad!