Una fiscalización intersectorial permitió descubrir un criadero y matadero clandestino en Calama. El recinto operaba en el sector de parcelas de Chunchuri poniente de la comuna, y fue descubierto tras la instancia coordinada por la Delegación Presidencial Provincial de El Loa tras una denuncia. Hasta el sector concurrieron funcionarios de la DPP, equipos de la Seremi de Salud, Dirección del Trabajo, SAG, Carabineros y la Policía de Investigaciones, quienes constataron graves irregularidades sanitarias, laborales y administrativas; e incluso, confirmaron la relación del recinto con otra sociedad comercial que ya había sido denunciada por distintos motivos. De acuerdo al Delegado Presidencial Provincial de El Loa, Miguel Ballesteros, el recinto está asociado a una sociedad que ya tuvo la prohibición de funcionamiento de un hotel y un restaurante. Además, confirmó la apertura de una investigación penal. Este recinto se emplaza en terreno fiscal y lo que estamos haciendo hoy es infraccionar desde la perspectiva de la Dirección del Trabajo y también dejar con un sumario sanitario y prohibición de funcionamiento este recinto, además se abre una investigación penal por la denuncia que estamos haciendo asociada a todas las irregularidades vinculadas a esta sociedad comercial, sostuvo el delegado. Por otra parte, la Dirección del Trabajo detectó la presencia de tres trabajados extranjeros, todos en situación de informalidad. Constatamos la presencia de tres trabajadores que se encontraban en informalidad laboral, sin contratos, cumpliendo funciones de lunes a domingo sin descansos. No existe declaración de cotizaciones previsionales, ni registro de asistencia para determinar la jornada, señaló el inspector provincial del Trabajo, Manuel Palta. En este escenario, se estableció un sumario sanitario y la prohibición de funcionamiento del recinto, además de infracciones por informalidad laboral y el inicio de una investigación penal por operación clandestina en terreno fiscal y presunta reincidencia de una sociedad comercial.
Una fiscalización intersectorial permitió descubrir un criadero y matadero clandestino en Calama. El recinto operaba en el sector de parcelas de Chunchuri poniente de la comuna, y fue descubierto tras la instancia coordinada por la Delegación Presidencial Provincial de El Loa tras una denuncia. Hasta el sector concurrieron funcionarios de la DPP, equipos de la Seremi de Salud, Dirección del Trabajo, SAG, Carabineros y la Policía de Investigaciones, quienes constataron graves irregularidades sanitarias, laborales y administrativas; e incluso, confirmaron la relación del recinto con otra sociedad comercial que ya había sido denunciada por distintos motivos. De acuerdo al Delegado Presidencial Provincial de El Loa, Miguel Ballesteros, el recinto está asociado a una sociedad que ya tuvo la prohibición de funcionamiento de un hotel y un restaurante. Además, confirmó la apertura de una investigación penal. Este recinto se emplaza en terreno fiscal y lo que estamos haciendo hoy es infraccionar desde la perspectiva de la Dirección del Trabajo y también dejar con un sumario sanitario y prohibición de funcionamiento este recinto, además se abre una investigación penal por la denuncia que estamos haciendo asociada a todas las irregularidades vinculadas a esta sociedad comercial, sostuvo el delegado. Por otra parte, la Dirección del Trabajo detectó la presencia de tres trabajados extranjeros, todos en situación de informalidad. Constatamos la presencia de tres trabajadores que se encontraban en informalidad laboral, sin contratos, cumpliendo funciones de lunes a domingo sin descansos. No existe declaración de cotizaciones previsionales, ni registro de asistencia para determinar la jornada, señaló el inspector provincial del Trabajo, Manuel Palta. En este escenario, se estableció un sumario sanitario y la prohibición de funcionamiento del recinto, además de infracciones por informalidad laboral y el inicio de una investigación penal por operación clandestina en terreno fiscal y presunta reincidencia de una sociedad comercial.
