Con una inversión que superó los $2 mil millones de dólares, SPENCE I BHP inauguró una nueva planta concentrada de cobre y molibdeno, la cual incorpora tecnología de punta que va de la mano con la utilización de energías renovables junto con la utilización de agua desalinizada para sus procesos. El proyecto fue el único que no se detuvo durante la pandemia, gracias al esfuerzo de más de 12 mil personas quienes trabajaron por más de mil días para terminar las obras.
Con una inversión que superó los $2 mil millones de dólares, SPENCE I BHP inauguró una nueva planta concentrada de cobre y molibdeno, la cual incorpora tecnología de punta que va de la mano con la utilización de energías renovables junto con la utilización de agua desalinizada para sus procesos. El proyecto fue el único que no se detuvo durante la pandemia, gracias al esfuerzo de más de 12 mil personas quienes trabajaron por más de mil días para terminar las obras.