La ciudad de Antofagasta enfrenta una crítica realidad sanitaria: un 40% del total de la basura domiciliaria que se retira diariamente de las calles proviene de los llamados microbasurales. Esta cifra no solo grafica la magnitud del problema sino que también pone en evidencia la irresponsabilidad de vecinos que utilizan cualquier espacio público como basurero improvisado, sin considerar el impacto negativo en el entorno. En términos concretos, la dimensión es abrumadora: si el servicio de recolección de basura domiciliaria lleva un promedio de 14 mil toneladas mensuales hasta el Relleno Sanitario Chaqueta Blanca, 5.600 toneladas —el 40%— corresponden exclusivamente a las labores de control y erradicación de estos puntos ilegales de acopio de desechos. Ante esto, la directora de Aseo de la municipalidad, Natalia Cáceres, manifestó su preocupación ante la situación e hizo un enérgico llamado a la comunidad a cumplir con los horarios y días establecidos para la disposición de la basura. La municipalidad realiza numerosos y valiosos esfuerzos diariamente para mantener la ciudad en las condiciones de aseo óptimas para su funcionamiento diario, señaló. No obstante, la funcionaria lamentó queexisten vecinos irresponsables que no entienden estos esfuerzos en recursos humanos y de camiones dedicados al servicio. El 40 por ciento aproximadamente de la basura que se encuentra dispersa en la ciudad corresponde a microbasurales formada por esta irresponsabilidad, sentenció Cáceres. Finalmente, la reincidencia agrava el panorama: existen al menos 15 puntos identificados en Antofagasta que son utilizados recurrentemente como basurales. Aunque son erradicados constantemente, a los pocos días el acopio de desperdicios comienza de nuevo, sumándose a la aparición de nuevos focos de contaminación que afectan gravemente los barrios y sus entornos.
La ciudad de Antofagasta enfrenta una crítica realidad sanitaria: un 40% del total de la basura domiciliaria que se retira diariamente de las calles proviene de los llamados microbasurales. Esta cifra no solo grafica la magnitud del problema sino que también pone en evidencia la irresponsabilidad de vecinos que utilizan cualquier espacio público como basurero improvisado, sin considerar el impacto negativo en el entorno. En términos concretos, la dimensión es abrumadora: si el servicio de recolección de basura domiciliaria lleva un promedio de 14 mil toneladas mensuales hasta el Relleno Sanitario Chaqueta Blanca, 5.600 toneladas —el 40%— corresponden exclusivamente a las labores de control y erradicación de estos puntos ilegales de acopio de desechos. Ante esto, la directora de Aseo de la municipalidad, Natalia Cáceres, manifestó su preocupación ante la situación e hizo un enérgico llamado a la comunidad a cumplir con los horarios y días establecidos para la disposición de la basura. La municipalidad realiza numerosos y valiosos esfuerzos diariamente para mantener la ciudad en las condiciones de aseo óptimas para su funcionamiento diario, señaló. No obstante, la funcionaria lamentó queexisten vecinos irresponsables que no entienden estos esfuerzos en recursos humanos y de camiones dedicados al servicio. El 40 por ciento aproximadamente de la basura que se encuentra dispersa en la ciudad corresponde a microbasurales formada por esta irresponsabilidad, sentenció Cáceres. Finalmente, la reincidencia agrava el panorama: existen al menos 15 puntos identificados en Antofagasta que son utilizados recurrentemente como basurales. Aunque son erradicados constantemente, a los pocos días el acopio de desperdicios comienza de nuevo, sumándose a la aparición de nuevos focos de contaminación que afectan gravemente los barrios y sus entornos.