Una investigación periodística de Canal 13 y Ex Ante devela el audaz modus operandi de mafias asaltantes que roban al transporte de cobre en pleno desierto. Actuar que comparan con narcos y grupos organizados que roban madera en el sur del país, calificándolo de estilo parmilitar debido a la vestimenta con camuflaje y el armamento que utilizan. Sostienen que en agosto del 2022, Carabineros del OS9 había reunido una serie de antecedentes sobre Jonathan Olave, identificado como el líder de una de las bandas y Andrés Sutar, su socio, quien estaría implicado en la desaparición de la joven Javiera Jiménez y se mantiene prófugo. Habían sido identificados como participantes del asalto cometido en contra de un camión con cátodos en un servicentro de Antofagasta, a lo que se sumó la desaparición de la joven influencer, quien llevaba seis meses en una relación con Sutar. En octubre fueron detenidos integrantes de la banda en Calama y Antofagasta. Pero la sorpresa estuvo cuando llegaron hasta el domicilio de Olave, se encontraba parapléjico en silla de ruedas, producto de un disparo que habría recibido de su ex socio, Andrés Sutar, supuestamente por mantener una relación paralela con la joven desaparecida. Siento que la Javiera ya no está, que él le hizo algo (...) como este tipo era un delincuente, tenía el tema del robo del cobre, se conocía los caminos del desierto, donde él escondía el cobre y todo eso. Creo que por ahí dejó a mi hija, en un lugar que solamente él lo sabe, manifestó para Canal 13, Emilia Galleguillos, madre de Javiera. En un peritaje realizado a una camioneta de Sutar, fueron encontrados restos de sangre. Mientras que la familia de la joven continúa la búsqueda en sectores del desierto donde la banda podría haber enterrado cobre. El Ferrocarril Antofagasta Bolivia (FCAB) suma 36 asaltos de este tipo en 2020, el 2021 fueron 28 y el 2022 los atracos subieron a 39. En la foto Jonathan Olave y Andrés Sutar.
La PDI informó que detectives de la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado Antofagasta en conjunto con la Fiscalía Local de Calama, lograron la desarticulación completa de una banda criminal organizada a través de la operación Vilama II. Los oficiales de la Brianco Antofagasta, mediante el análisis Criminal y la inteligencia policial, lograron individualizar a un grupo de sujetos quienes se dedicaban activamente al tráfico de importantes cantidades de droga en esta región. Estos antecedentes fueron debidamente denunciados a la Fiscalía Local de Calama, iniciándose la correspondiente investigación y obteniéndose la autorización de diversas técnicas legales, las que permitieron a los detectives desbaratar por completo esta banda criminal conformada por tres hombres, dos bolivianos y un chileno, los que adquirían, internaban, acopiaban y posteriormente comercializaban importantes y diversos tipos de droga tanto en ésta, como en otras regiones del país. El modus operandi consistía en la adquisición de las drogas a proveedores extranjeros, las que eran internadas al territorio nacional por pasos no habilitados, mediante la utilización de correos humanos, acopiándola en diversos inmuebles particulares para posteriormente proceder a su comercialización y distribución a otros traficantes menores de las provincias de El Loa en Antofagasta como también a la zona central. Conforme los antecedentes obtenidos durante el proceso investigativo, que se extendió por más de ocho meses establecieron fehacientemente, conforme a las diligencias realizadas, el día exacto en que estos sujetos habían recepcionado y acopiado una nueva e importante cantidad de sustancias ilícitas. Todo estos antecedentes fueron puestos en conocimiento del fiscal a cargo, quien gestionó con el Juez de Garantía respectivo las ordenes de entrada y registro para los inmuebles investigados, las que al materializarse permitieron encontrar importantes cantidades de droga acopiada en diversos sacos, procediendo a la detención de los principales investigados, conforme a las evidencias y diversos medios de prueba recopilados. En total encontraron 203 kilos 210 gramos de droga, como cannabis sativa y clorhidrato de cocaína; además de un vehículo tipo sedan, entre otras especies atingentes al delito investigado, evitándose así la distribución de más de 200 mil dosis en la población, lo que generaría ganancias ilícitas a los investigados por sobre los $420 millones de pesos. Todos los imputados fueron formalizados por el fiscal a cargo de la investigación en el Juzgado de Garantía de Calama, donde se decretó la medida cautelar de prisión preventiva para los tres investigados, fijándose 100 días para continuar con la investigación.
La PDI informó que la Brigada Antinarcóticos y Contra el Crimen Organizado Antofagasta en conjunto a la unidad de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI) de la Fiscalía Regional, mediante diversas técnicas investigativas de análisis e inteligencia policial, lograron desbaratar una banda criminal dedicada al tráfico de drogas en la capital regional. La investigación develó que la banda se conformaba por cuatro ciudadanos colombianos residentes de la ciudad, quienes se dedicaban activamente a la adquisición de droga de parte de proveedores bolivianos. Sustancias que eran acopiadas en un inmueble en el sector centro alto de la capital regional, desde donde era distribuida a otros traficantes de Antofagasta. Gracias a este trabajo de investigación, los detectives intervinieron dos inmuebles donde lograron incautar 40 kilos de cannabis procesada, 1.060 gramos de cocaína base y 62,26 gramos de ketamina, un automóvil, dos armas tipo pistolas, las que se encuentran modificadas y $1 millón 312 mil pesos en dinero en efectivo, junto a diversas especies vinculadas al delito. Los detenidos junto con los medios de prueba fueron puestos a disposición del Juzgado de Garantía, quedando todos en prisión preventiva, fijándose un plazo de investigación de 100 días.
Con los alegatos de apertura más la lectura de la acusación de la Fiscalía de Focos Investigativos y Análisis Criminal (SACFI) de Antofagasta, por parte del Tribunal Oral en Lo Penal de la ciudad, comenzó el juicio oral contra cuatro imputados por los delitos de tráfico ilícito de drogas, receptación de vehículo motorizado y uso de placas de otro vehículo, en grado consumado. Específicamente, la fiscal adjunto Sacfi, Claudia Vega, acusó al imputado W.P.B. por su autoría en los delitos de tráfico ilícito de droga s, porte o tenencia ilegal de arma de fuego y de municiones. Mientras que P.G.P. y B.R.R. fueron acusados por tráfico ilícito de drogas y C.O.S. por tráfico ilícito de drogas, receptación y uso de placa patente falsa, todos en grado consumados. Vega, señaló a través de diversas técnicas investigativas contempladas en la Ley 20.000, tales como interceptaciones telefónicas, vigilancias y seguimientos, se obtuvo la información que el 24 de octubre del 2021, los acusados W.P.B., B.R.R., C.O.S. y P.G.P. viajarían con dos vehículos hasta Iquique a buscar una importante cantidad de drogas para ser transportada hasta Antofagasta. Por lo que se instruyó a personal de OS7 de Carabineros, que se instalaran en dos puntos de la Ruta 5 Norte por donde pasarían los acusados. El primer vehículo, una camioneta -que cumplía la función de punta de lanza - era conducido por el acusado B.R.R. en compañía de P.G.P. y C.O.S. y el segundo vehículo era conducido por W.P.B., quien mantenía en su cuello su credencial de funcionario de la Intendencia de Antofagasta y guardaba oculta en el portamaletas marihuana, además de un arma de fuego tipo pistola y municiones, explicó la fiscal Claudia Vega. El caso La banda fue sorprendida en la Ruta 5 Norte, región de Antofagasta. Los cuatro imputados se transportaban en dos vehículos, uno con encargo por robo en Santiago y el otro con los logos del Gobierno, manejado por el funcionario público (encargado de la vigilancia de drones y contratado por la Subsecretaría de Prevención del Delito) con el fin de evitar fiscalizaciones. Según precisó la fiscal Vega, el total de la droga decomisada fue avaluada en más de $154 millones de pesos. Alcanzando un total de 25 kilos de marihuana, clorhidrato de cocaína y pasta base de cocaína.
Con los alegatos de apertura, más la lectura de acusación de la Fiscalía de Focos Investigativos y Análisis Criminal (SACFI) de la Fiscalía Regional de Antofagasta, por parte del Tribunal Oral en Lo Penal de esa ciudad, comenzó el juicio oral contra cuatro imputados miembros de la Banda Los Lulas. El fiscal jefe y adjunto de Sacfi, Juan Castro Bekios y Jonathan Kendall, respectivamente, acusan a los imputados L.A.R.C. y K.S.J.V. como autores de los delitos consumados de lavado de dinero, tráfico ilícito de drogas y tenencia ilegal de municiones. Hechos perpetrados el 14 de julio del 2020. Asimismo, el equipo SACFI de Antofagasta acusó también a los imputados E.J.Z.A. como autores de los delitos consumados de tráfico ilícito de drogas, tenencias ilegales de arma de fuego prohibida, municiones y arma prohibida. También a G.E.C.V. por los delitos de tráfico ilícito de drogas y lavado de dineros. Según la acusación, los hechos ocurrieron desde enero del 2020 cuando los imputados L.A.R.C., K.S.J.V. y E.J.Z.A., entre otros, forman una agrupación delictual dedicada al tráfico de drogas, particularmente a la compra y guarda de droga, para su posterior comercialización en el sector norte de Antofagasta. Cabe destacar que la adquisición habitual de droga la realizaban los imputados L.A.R.C. y K.S.J.V., quienes además de vender parte de las sustancias que adquieren, normalmente se las traspasaban a terceros. Tanto para que la guardaran como para que la vendieran para ellos y así no ser sorprendidos comercializando drogas. Es así que habitualmente transferían drogas a la imputada E.J.C.A., quien cumple la función de guardar y vender la droga de la pareja de imputados. Dicha venta la hacía desde un domicilio ubicado en el sector norte de la ciudad, sector La Chimba. El 15 de julio del 2020, en cumplimiento de diversas órdenes de detención, de entrada, registro e incautación otorgadas por el Tribunal de Garantía de Antofagasta, tras petición del Ministerio Público, ingresaron al domicilio de la imputada E.J.Z.A.. En este lugar encontraron: 163 gramos de pasta base de cocaína, un celular, $77.000 en efectivo, una pistola ametralladora marca Zoraki calibre 9 mm., dos cargadores y dos cartuchos balísticos calibre 9 mm. Además de 49 cartuchos sin percutir calibre 12 mm. para escopeta, 50 cartuchos sin percutir marca Winchester calibre 40 mm., entre otros. El mismo día registraron el domicilio de los imputados L.A.R.C. y K.S.J.V., donde incautaron ocho cartuchos sin percutir calibre 12 mm, 10 teléfonos móviles, $1.113.080 en efectivo, vehículo station wagon marca Dodge, una camioneta marca Mitsubishi y una camioneta marca Toyota. El segundo hecho ocurrió el 8 de junio del 2020, en un domicilio ubicado sector la Chimba, donde la imputada G.C.V. se dedicaba a la venta de drogas. El 15 de julio del 2020, tras previa autorización de ingreso otorgada por el Tribunal de Garantía, personal de Carabineros accedió al domicilio de la imputada G.C.V., donde incautaron un total de 318 gramos y 680 miligramos de cocaína base, $500.160 dinero en efectivo, 30 pastillas de clonazepam; además de 12 gramos y 710 miligramos de pasta base de cocaína. El tercer hecho es la acusación contra a los imputados L.A.R.C., K.S.J.V y G.E.C.V. sobre los antecedentes que demuestran que no registran declaraciones que den cuenta de algún tipo de ingreso legítimamente adquirido. Es decir, las actividades realizadas por los imputados constituyen diversas operaciones de lavado de dinero. Nota de archivo: